Archive for the ‘contracultura’ Category
Sex and Seditionaries: el punk a subasta
El pasado 31 de octubre, Christies organizó en Londres la subasta “Resurrection: Avant-Garde Fashion”, en la que junto a piezas emblemáticas de Yves Saint Laurent, Courrèges o Balenciaga se subastó un lote de prendas diseñadas por Malcom McLaren y Vivienne Westwood para Sex and Seditionaries, la marca de ropa punk que la pareja comercializó a mediados de los 70.
Sex and Seditionaries era un pequeño local situado en el 430 de King’s Road. Nació a partir de una modesta tienda de ropa Teddy Boy, que montó Malcom McLaren en 1971. Allí, una jovencísima Vivienne Westwood le ayudaba remendando ropa de los 50. Poco a poco McLaren y Westwood comenzaron a mezclar la estética rocker con prendas de cuero y látex del más puro estilo S&M . De repente, todo se llenó de cremalleras, imperdibles y cadenas. También comenzaron a aparecer las primeras camisetas con motivos pornográficos y lemas vagamente revolucionarios. En 1974 el pequeño negocio pasó a llamarse SEX.
No obstante, SEX, más tarde reconvertido en Seditionaries, continuaba siendo un espacio bastante precario en el que se amontonaban las camisetas que la pareja estampaba en el suelo de la cocina de su apartamento. Fieles a la ética Do it Yourself, ellos mismos intervenian viejas camisetas usadas que compraban en mercadillos. Sex and Seditionaries no era tanto una marca como una antimarca. Un conjunto bastante caótico de prendas creadas (más bien destruidas) artesanalmente.
Como era de esperar, su producción fue bastante escasa. Esto, unido al hecho de que los clientes de Sex and Seditionaries solían gastar su ropa hasta que quedaba reducida a jirones (en realidad, ya estaba hecha jirones cuando la compraban) ha hecho que sea muy difícil encontrar prendas originales de esta época. Las pocas que aún se conservan se han convertido en auténticas reliquias que son perseguidas por coleccionistas de todo el mundo.
Como consecuencia se ha producido una auténtica avalancha de falsificaciones, que se evidenció en el verano de 2008. Entonces, muchos de los coleccionistas de Sex and Seditionaries, descubrieron que las prendas por la que habían pagado auténticas fortunas eran en realidad falsificaciones creadas por Simon Easton, un antiguo colaborador de McLaren.
Las alarmas saltaron cuando el propio Malcom McLaren, declaró que un lote de prendas de la marca por el que Damien Hirst había pagado más de 100.000 euros eran en realidad falsificaciones. McLaren dijo:
Imagino que en la subasta de Christies, más de uno debía andar con la mosca detras de la oreja. De hecho, para eliminar cualquier duda, todas las piezas subastadas estaban minuciosamente catalogadas y contaban con una completa descripción técnica y referencias bibliográficas.
En el lote además de varias camisetas decoradas con las clásicas esvásticas, fueron subastados zapatos y complementos tan inquietantes como una máscara sado-masoquista de cuero plateado, réplica de la utilizada en los 70 por Peter Cook , el violador de Cambridge. Alguien pagó por ella $ 2075. Todas las piezas subastadas fueron vendidas por un precio total de algo más de $500.000.
The great Damien Hirst's swindle
Damien Hirst, el artista vivo mejor pagado del mundo, el líder indiscutido de los Young British Artist, el hombre que se hizo millonario vendiendo vísceras flotando en formol y al que muchos consideran el mayor timador del mundo… ha sido victima de un bonito timo.
Todo empezó cuando Hirst compró a Simon Easton, colaborador durante años de Malcom McLaren, un montón de bolsas repletas de lo que creía que eran ropas originales diseñadas por McLaren y Vivienne Westwood en los 70’s para Sex & Seditionaries, su legendaria tienda del 430 King’s Road. Hirst pagó 100.000 euros por el lote.
Cuando McLaren acudió a la mansión de Hirst para examinar su compra, descubrió que las ropas eran falsas.
McLaren dijo: «No eran las telas que usamos hace 35 años, y la costura era totalmente diferente. Además había bolsas y bolsas de ropa y nosotros nunca fabricamos tanto. Hacíamos esas ropas en la cocina de mi casa. Cada pieza era única”.
Hirst ha emprendido acciones legales contra Easton, que por su parte afirma: «Absolutamente todo lo que mis clientes han adquirido es auténtico. McLaren no participó en el diseño y ni en la fabricación de estas ropas. Intenta reescribir la historia, pero sabe menos acerca de ellas que cualquier coleccionista».
Personalmente no pagaría un solo euro por ninguna de las piezas de Hirst, pero lo habría hecho con gusto por ver su cara cuando McLaren le dijo que había sido timado :-DDDD
bye, bye Banksy…
Acaban de colgar en Youtube el vídeo oficial de The Cans Festival, el evento organizado por Banksy, que congregó el pasado mayo a lo más florido del stencil internacional y a más de 25.000 visitantes. Durante tres días, litros y litros de pintura transformaron un lúgubre túnel abandonado en un inmenso y colorido mural.
Este vídeo es una muestra más de como, a través de acontecimientos como The Cans Festival y sobre todo de Street Art, la exposición de la Tate Modern, el Street Art se ha puesto de moda y se ha plantado en la primera línea mediática.
Parece evidente que cuando un modo de expresión nacido en la calle, más o menos anónimo y más o menos clandestino, es avalado por instituciones como la Tate Modern, se convierte en otra cosa. Se desactiva. De hecho, los bonitos murales de la Tate Modern son custodiados por las mismas cámaras de seguridad que impiden a otros grafiteros intervenir sobre ellos.
La dimensión estética del Street Art tiene menos que ver con lo formal que con su modo de llamar a una cierta forma de resistencia icónica. Lo mejor del Street Art es su capacidad para infiltrarse entre los signos que nos rodean, para aprovechar las fisuras del sistema para extenderse. Nada de eso está en la Tate.
En el caso del stencil esto resulta especialmente evidente. La plantilla de la que nace, solo tiene sentido como soporte de una imagen que se repite una y otra vez. Cuando el stencil trata de convertirse en una imagen única, como hace Banksy, se desnaturaliza. Y aún lo hace más cuando transmite un mensaje efectista, sentimental, estereotipado…
Algo parecido ocurre en relación a los murales que adornan la Tate. Las propias imágenes que muestran y su enorme escala encajan perfectamente en el espectáculo icónico que definió Guy Debord. Así, paradójicamente, formas de expresión que nacieron como una forma de resistencia frente al espectáculo, sirven ahora para retroalimentarlo.
En fin, que parece que ciertas formas de Street Art, comienzan a dar muestras de agotamiento y estetización. Y Banksy es su bandera.
PD: Al margen de Street Art, en el vídeo suena el espléndido Going Underground … No me resisto a dejaros el original de los Jam. ¡Pura Vida!
Active Resistance to Propaganda. The Vivienne Westwood Opus
Vivienne Westwood, la reina madre del diseño punk, y Kraken Opus han publicado «Active Resistance to Propaganda» The Vivienne Westwood Opus. Se trata de un descomunal libro de más de 90 cm. de alto y cerca de 25 kg. de peso, que se presenta en una edición limitada de 900 ejemplares, con 9 portadas diferentes.
En el libro se alternan 97 polaroids de gran formato (50 x 60 cm) con los textos de Active Resistance to Propaganda, manifiesto creativo de Westwood, en el que en forma dramatizada personajes como Pinocho, la Alicia de Lewis Caroll y Aristóteles, debaten acerca del papel de la imagen, el arte y la propaganda en la sociedad de consumo.
Según Westwood la cultura y el arte son el mejor antídoto de la propaganda. Frente a la simplificación de la realidad que supone la propaganda, la cultura nos resitúa ante la complejidad del mundo .
El contenido de este impresionante libro / objeto puede verse en The Vivienne Westwood Opus. También desde la web Active Resistance puede accederse a los textos de Active Resistance to Propaganda e incluso descargarlos en pdf en varios idiomas diferentes.
Sin embargo, «Active Resistance to Propaganda» cuesta entre £ 1.400 y £ 2.100, dependiendo de la portada elegida. En una de ellas, luce orgulloso el lema «I am expensiv» remitiendo sin contemplaciones a la peor concepción del arte como objeto de lujo. ¿Puede hacerse una llamada a la Resistencia Activa desde un formato tan elitista como el de este libro? ¿Estamos ante la enésima contradicción del indomable espíritu punk o ante su máxima expresión?
Demasiados interrogantes. Prefiero pensar que Mrs. Weestwood está ya muy mayor.
The Cans Festival
Durante los días 3, 4 y 5 de mayo, se ha celebrado en Londres The Cans Festival, un evento que ha reunido alrededor del stencil a más de 600 artistas y 25.000 visitantes. Aquí os dejo esta galería de Flickr, que muestra lo que ha ocurrido allí. También podéis echar un vistazo a este vídeo.
Lo leí en Senses Lost.
La gráfica del Mayo del 68
El Mayo del 68 era hasta hace muy poco un símbolo de entreguismo. El de una generación que soñó con encontrar la playa bajo los adoquines y terminó a bordo de un coche oficial.
Sin embargo, después de que Sarkozy proclamará: “Hay que liquidar Mayo del 68”, en favor de “la cultura del mérito” y de “el respeto a la autoridad del maestro”, las viejas proclamas de los estudiantes franceses, cobran nuevamente actualidad.
Pero además de su influencia política, el Mayo del 68 plantea un nuevo modo de entender la comunicación gráfica. Los carteles y graffitis del mayo francés son, por ejemplo, el antecedente más directo del Culture Jamming y la publicidad de guerrilla.
Solo por eso, y también por llevar la contraria a Sarkozy, vale la pena recuperar la gráfica de los cartelistas del Atelier Populaire de la Escuela de Bellas Artes de Paris. En aquel lejano mes de mayo, desde el Atelier ocupado por trabajadores y estudiantes, se editaron cerca de 500.000 carteles con casi 400 diseños diferentes.
En junio, las aguas volvieron a su cauce y los estudiantes a sus aulas. Poco a poco, el espíritu del Mayo francés se fue disolviendo y aquellos jóvenes iracundos pasaron a otras cosas. Algunos de ellos terminaron a bordo de un coche oficial.
Culture Jamming: Ruido en la transmisión
Media hacking, terror- art, acciones de guerrilla cultural, Subvertising o snipers son algunas de las categorías que se tratan en este artículo. Personalmente, creo que ultimamente se tiende a sobrevalorar estas formas de expresión, que con frecuencia transmiten un mensaje bastante plano. Sin embargo, reconozco que poseen una enorme vitalidad y que, en su inmediatez, suponen un soplo de aire fresco en el viciadísimo circuito del arte contemporáneo.
De entre el montón de links que aporta el artículo destacaría esta joyita: The Buble Proyect que propone intervenir en los anuncios callejeros mediante la colocación en ellos de pegatinas en forma de globo de comic. Estas pegatinas, que podemos descargar e imprimir desde la web del proyecto, son el soporte para intervenciones anónimas y llenas de ingenio.
Pixação

“Pixação: São Paulo Signature” es un libro que analiza esta forma de expresión genuinamente brasilera. El pixação es un tipo de pintada que surge en São Paulo en los 60 como forma de protesta política. Su nombre viene del término “piche” (pez o alquitrán en portugués), que es el material empleado para pintar con brocha o rodillo.
El pixação nace en plena dictadura militar. En aquellos años São Paulo, una megalópolis eminentemente industrial, era el núcleo del movimiento sindical brasilero y el pixação su forma de manifestarse contra la represión. Posteriormente, con la apertura política de comienzos de los 80, el pixação fue perdiendo su carácter político, para convertirse en una forma de expresión más personal, vinculada con la cultura del graffiti.

De hecho, es entonces cuando influidos por el graffiti neoyorkino, los pixadores paulistas pasaron a tomar su firma o tag como motivo fundamental de sus pintadas. Esta forma de firma persiste hasta nuestros días.
Los pixaçãos se basan en tipografías angulosas y alargadas, debido a que con frecuencia están realizados con rodillos. Hoy los pixadores plasman sus pixos en cornisas y fachadas, retándose para pintar los lugares mas altos y peligrosos. Llegan a escalar todo tipo de edificios, y a formar enormes torres humanas para llegar a los lugares más complicados.
Lo leí en Perros Callejeros. El libro podéis encontrarlo en Subaquatica.
Rotten: No Irish, No Blacks, No Dogs
El libro, es un recorrido por lo que pudo haber sido y no fue; un repaso a un movimiento imposible que, sin embargo, treinta años después sigue teniendo una enorme influencia social y cultural.
Lydon, con un estilo deliberadamente desordenado, desmonta algunos de los tópicos que rodean al punk. Por ejemplo, la influencia del Situacionismo francés en su nacimiento. Lydon dice; “Todo aquel rollo de la relación con los situacionistas es una payasada, una auténtica estupidez. Las revueltas de París y el movimiento situacionista de los setenta no fueron más que chorradas de intelectuales franceses. Historias para las enciclopedias. No existe un plan maestro de conspiración en nada, ni siquiera en los gobiernos. Todo es una especie de caos vagamente organizado”
¿Arte radical?
El proyecto consiste en una web que ofrece información y recursos para cruzar clandestinamente las fronteras europeas. Además de información acerca rutas de montaña, túneles y otras vías de entrada ajenas al control policial, el sitio ofrece información acerca del nivel de dificultad de la ruta escogida, su duración, el equipo necesario, etc.
Para romper con la concepción de Internet como un espacio abierto, Border Xing Guide solo es accesible desde determinados ordenadores autorizados. Al entrar a la web del proyecto desde cualquier otro equipo, el acceso es denegado y se ofrece un listado con la ubicación de los equipos “accesibles”. El usuario interesado en acceder a la información deberá desplazarse hasta el lugar en el que se encuentran estos equipos. En España, hay un ordenador en Barcelona y otro en Valencia, ambos pertenecientes al proyecto Technologies To The People.
De este modo, el proyecto trata de socavar dos ideas firmemente asentadas: que las fronteras pueden restringir el movimiento de personas y que Internet es un espacio libre y sin fronteras.
Hasta aquí, todo iba bien. El proyecto participaba de manera impecable de la concepción de la creación artística como posicionamiento crítico frente al mundo. Un aspecto que constituye una de las señas de identidad del arte contemporáneo y punto de partida del particular combate entre Vanguardia y Tradición. No en vano, Vanguardia es un término militar, que se refiere a aquellos que en el combate, se sitúan en primera línea de fuego.
Sin embargo, el proyecto comienza a hacer agua, cuando comprobamos que está producido por la Tate. De hecho, está integrado en su colección de Net- Art y en la propia Tate hay ordenadores autorizados para visualizar sus contenidos.
¿Puede mantenerse un discurso crítico, incluso ilegal, desde una institución sufragada por el British Government y las empresas multinacionales que fomentan los valores e ideas que se pretenden combatir? NO.
Si el medio es el mensaje, el dinero de la Tate convierte Border Xing Guide en un mensaje desactivado y sin credibilidad. Un proyecto subvencionado, cuya finalidad real, no es tanto la crítica, como la legitimación de las instituciones que llenan el bolsillo del autor.